Coger el lápiz bien es más importante de lo que crees.
¿Por qué debemos coger el lápiz correctamente?
¿Cómo lo hacemos?
Con el siguiente material:
Una vez hemos sacado punta al lápiz, lo sujetamos de la siguiente manera:
En la parte ancha del lápiz podéis marcar la forma de la punta del pulgar.
Recordemos que hay que sujetar la hoja con la otra mano.
Ahora ya podemos practicar. Lo más fácil es un ratito cada día para afianzar este nuevo hábito. En nuestra web os podéis descargar los recursos imprimibles para practicar.
En el mercado encontraréis adaptadores triangulares para los lápices i lápices triangulares, pero, a veces, ya lo hemos probado todo y un utensilio diferente siempre motiva mucho más.
Dejad el lápiz a la vista y siempre con la punta lista para escribir, así será más tentador de utilizarlo a menudo.
No importa la edad que se tenga, con voluntad siempre se está a tiempo a corregir.
He comprobado que cuando ya llevamos varios días practicando con el lápiz de "paleta", el lápiz normal se sujeta bien y en más ocasiones sin que se dé cuenta.
Para reforzar la práctica piensa en utensilios que utilizamos diariamente o algunas veces y en las que los dedos tienen la posición del lápiz. En estos usos normalmente no hay mala práctica (pinzas de tender la ropa, coger los cubiertos, pegar pegatinas, quitar las semillas de la sandía ...) y la posición es la correcta.
Por supuesto, los ejercicios de psicomotricidad fina ayudan mucho a la hora de fortalecer el tono muscular (plastilina, barro, pinchar, trabajos con papel, ...).
Pruébalo. El resultado es sorprendente.
¿Por qué debemos coger el lápiz correctamente?
- Para conseguir un trazo ágil, fluido y preciso.
- Para ver bien lo que escribimos mientras escribimos.
- Para evitar la tensión y el cansancio.
- Porque forma parte de nuestra carta de presentación.
- Para que la letra tenga la inclinación correcta (ligeramente hacia la derecha).
¿Cómo lo hacemos?
Con el siguiente material:
- 1 lápiz de bricolaje o de paleta. Un recurso diferente a los lápices "convencionales".
- Una bola de papel pequeña o utensilio similar (si es necesario).
Una vez hemos sacado punta al lápiz, lo sujetamos de la siguiente manera:
- Situamos el dedo gordo (pulgar) en la parte ancha del lápiz.
- Situamos el dedo índice sobre la parte estrecha del lápiz.
- Ponemos el lateral del dedo corazón en la parte ancha que queda debajo.
- Escondemos los dedos meñique y anular cerrándolos y (si es necesario) sujetando una bola de papel ...
En la parte ancha del lápiz podéis marcar la forma de la punta del pulgar.
Recordemos que hay que sujetar la hoja con la otra mano.
Ahora ya podemos practicar. Lo más fácil es un ratito cada día para afianzar este nuevo hábito. En nuestra web os podéis descargar los recursos imprimibles para practicar.
En el mercado encontraréis adaptadores triangulares para los lápices i lápices triangulares, pero, a veces, ya lo hemos probado todo y un utensilio diferente siempre motiva mucho más.
Dejad el lápiz a la vista y siempre con la punta lista para escribir, así será más tentador de utilizarlo a menudo.
No importa la edad que se tenga, con voluntad siempre se está a tiempo a corregir.
He comprobado que cuando ya llevamos varios días practicando con el lápiz de "paleta", el lápiz normal se sujeta bien y en más ocasiones sin que se dé cuenta.
Para reforzar la práctica piensa en utensilios que utilizamos diariamente o algunas veces y en las que los dedos tienen la posición del lápiz. En estos usos normalmente no hay mala práctica (pinzas de tender la ropa, coger los cubiertos, pegar pegatinas, quitar las semillas de la sandía ...) y la posición es la correcta.
Por supuesto, los ejercicios de psicomotricidad fina ayudan mucho a la hora de fortalecer el tono muscular (plastilina, barro, pinchar, trabajos con papel, ...).
Pruébalo. El resultado es sorprendente.